El día antes de venir a España me decía mi jefa que saliera todos los días un poco durante el día para que me diera el sol. Y es que los de MaxFactor van crear una nueva tonalidad de fondo de maquillaje a base de polvos de talco exclusivo para mí. La cuestión es que yo le decía a mi jefa que sí que iba a salir, que me decía mi madre que hacía todos los días sol, bastante frío por la mañana pero que luego salía el sol y se quedaba muy buena temperatura. Pues no. Llevo aquí tres días y los tres días una niebla que no se ve el edificio de enfrente. Un frío ... que no asomo ni la patita. Ya le he dicho a mi madre que no me mienta, que vengo igual haga frío o calor, pero, claro, una viene tan ilusionada con el sol que luego se queda plof entre tinieblas.
Así que la mejor manera de pasar ayer la tarde fue meterme en la cocina y hacer unas rosquillas. Mmmm ¡qué ricas!. En Francia no cocino mucho porque mi casa es del tamaño de un cacahuete y mi cocina tan pequeña que solo tengo dos fuegos electricos y un microondas. Así que cada vez que vengo aprovecho para cocinar, que es uno de mis hobbies. Claro, que también necesito algún conejillo de indias que se atreva a comer lo que hago jeje. Hasta ahora, tengo bastante éxito. Así que practicaré más estos días por si me va mal en la ciencia dedicarme a la cocina.
Yo no sé si ha sido por la amenaza o para que no me pase el día haciendo respotería, que luego ya sabes a dónde va, la cuestión es que hoy parece que el cielo empieza a estar más azulito.
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