Fin de semana asiático

Pues sí, he pasado el fin de semana monotemático.

Ayer fui a cenar con unos amigos italianos a un restaurante vietnamita que hay en el barrio de Choisy (el barrio chino de París). El restaurante se llama Le Bambou y está considerado como uno de los mejores restaurantes de comida vietnamita de aquí. Y será así porque si llegas más tarde de las 8, empieza a ser complicado encontrar mesa y casi siempre hay unas colas de espera de 20 min. Incluso ayer, que hacía 20 grados, estaba lloviendo y hay mucha gente de vacaciones, había cola a partir de las 8:30 de la tarde. Y supongo que será por la comida porque por la presencia del establecimiento no es. El estilo se asemeja un poco a una taberna de platos combinados, con sus manteles de papel, sus botes rellenados de salsa y las mesas apegotonadas. Además el servicio roza el límite con lo educado. Me explico, por lo general en ningún restaurante de París te echan de la mesa, por mucha gente que haya esperando. Pero aquí no es que te vayan sirviendo rápido (que de hecho sí es así), sino que te recogen los platos mismo sin preguntar en cuanto ven que no tienes los palillos en la mano. De hecho ayer nos quitaron los platos a todos menos a uno que aún estaba comiendo, pero nos vinieron a preguntar si queríamos el postre y el café antes de que él terminara. Y con los postres nos trajeron la cuenta ... sin pedirla, por supuesto. Vamos, un estrés.

Eso sí, la comida mereció la pena. Yo me pedí vermicelli con cerdo asado y picado, mmmm, acompañado del zumo de coco (esta vez solo un vaso) y de postre lo más sorprendente: alubias rojas con leche de coco, buenísimas. Del postre no tengo foto, pero sí del plato para que lo veáis.

Al menos fue un buen final para lo triste que se había levantado el domingo.